Y fue el fin de semana del 13 y el 14 de este mes de junio según es costumbre en estos últimos años, para que los fresnerinos que viven o trabajan fuera del pueblo puedan acudir y para que los trabajos no impidan disfrutar a los residentes, que ya se sabe que en esta época toca plantar pimientos.
Es tanto el auge alcanzado por la FERIA DEL PIMIENTO que ya nos olvidamos de que la fiesta grande de Fresno era el corpus. Y aunque es verdad que esta no se parece a aquella hay que decir que no estuvo nada mal.
El sábado: diana floreada, frontón, carrera de cintas en tres modalidades de edad, juego de tarusa, pucheros para los más pequeños, a las doce de la noche fuegos artificiales (se quemaron en las Fontanicas pero se vieron desde cualquier punto del pueblo) muy buenos: un cuarto de hora sin parar de iluminar el cielo en colores y verbena hasta que el cuerpo aguantó: el cuerpo de los músicos, que ya se sabe que, en Fresno, uno de cada uno y medio nacemos con los pies clavados al suelo, pero nos gusta ver y oír.
El domingo: más diana floreada, que es como se llama en los programas oficiales al pasacalles de la banda municipal de Valencia porque flores no había y dianas tampoco, luego misa y procesión con la participación de los niños de primera comunión. Por la tarde bailes regionales con el boicot del tiempo.
Para los que no estuvieron les pasamos algunas fotos y les animamos para que vengan el año que próximo, que es una ocasión para el encuentro, para la reunión familiar y para darnos cuenta de lo viejos que se hacen los demás y de que no conocemos a casi nadie a menos que se parezcan a sus padres...o a sus abuelos. También para comprobar que el pueblo cambia...¡Y como! A mejor, desde luego.
Se puede ver en las fotos.
La procesión
Las autoridades
La oferta
Los balcones
Los niños de primera comunión
