viernes, 28 de agosto de 2009

PAELLADA TRADICIONAL DE FRESNO DE LA VEGA

Mucha participación, buena paella y entretenimiento para todos: así se puede resumir la fiesta de la paella que desde hace años organiza Fraxino en esta fecha del quince de agosto. Ya es una tradición quedar con los amigos y familiares para acudir con las tortillas, el embutido, las empanadas…y la paella que nos obsequia la asociación, cocinada por ellos mismos en sus enormes sartenes. Este año parece que fueron más de ochocientas raciones y tiene mucho mérito derrochar tanto entusiasmo y trabajo para que todos podamos confraternizar y disfrutar de un día de reencuentros, disfrute, juegos, bailes, comida, merienda y hasta cena, que algunos prolongaron la reunión hasta bien de noche lo cual fue un acierto si tenemos en cuenta el calor que hizo y lo agradable que llegó la tardecica.
El lugar, por otro lado, es que ni pintado. Hace años esto era un lodazal de aguas paradas y junqueras con el único atractivo de hacer adobes y deshacerse de las basuras. Hoy, en cambio, la laguna está enmarcada en un vaso de mampuestos de piedra con una isleta central, ocas nadando por ella, depuración con aporte de agua, y rodeada de praderas con árboles de sombra y parque infantil. Al lado están las piscinas, el campo de fútbol y el frontón, todo ello cuidado con primor. Una sugerencia es que se permita aumentar el porte de los árboles limitando las podas para aumentar la sombra.
Lo dicho: este año lo pasamos muy bien. Quedamos para el próximo.


Mientras unos hacen fila para recoger la paella, otros preparan las mesas. Sonia reparte las empanadas.








Una buena sombra es imprescindible, muchos madrugaron para tener buen sitio.










La cola es momento para hacer corrillos y charlar






Rosarito y Teresa



Dori con sus tias





Poco a poco, entre saludos, chistes y comentarios vamos llegando hasta la paella.









y empieza la comida



Siguen los encuentros























después la siesta para unos, la partida para otros, y las conversaciones para todos









































































Juegan los niños




















Y juegan los mayores





Domingo prueba suerte con la tarusa












Despues Neo, que tambien nos amenizó la tarde con música. ¡Hay que ver cuanto duran los discos del baile!










Y aunque empiece a oscurecer siguen los bailes







Termina un buen día. Nos vemos en la Feria del Pimiento. Ya sabeis: 26 y 27 de septiembre.

jueves, 13 de agosto de 2009

SI ALGUNOS VOLVIERAN, SE PERDIAN.

Algunas veces se hacen obras en el pueblo que cambian el paisaje de nuestra niñez o juventud : aquel caño en el que bebíamos agua con las tiras huecas de regaliz negro que vendía Joaquina, los bancos de hormigón por los que saltábamos jugando a pillar...y hasta echamos de menos las avispas que colonizaron el caño nuevo, ese que del que salía agua caliente que en invierno despedía vapor...entonces sentimos que algo nuestro desaparece, que nos roban el escenario de nuestros juegos, pero hay que reconocer que el tiempo pasa, Fresno progresa y ese progreso se refleja en los cambios del entorno.
Luego nos acostumbramos al paisaje nuevo como si fuera el de toda la vida, vienen nuevas generaciones que no conocieron otra cosa y cuando hablamos del caño viejo piensan que nos referimos al pilón de ladrillo de los años sesenta y tienen razón: es el de toda la vida de ellos.
Bueno, para darnos un baño de nostalgia y para que los jóvenes sepan que hubo otro caño viejo y otro caño nuevo y que ninguno de ellos era el pilón, tenemos algunas fotografías de la plaza: en ellas vemos como ha ido cambiando desde principios del siglo pasado. A muchos nos resultan entrañables pero vistas ahora parece que hubieran salido de algún agujero negro de la historia.
Esta foto es de las más entrañables entre las conocidas. La publicó Susana Comas en Facebook. En el centro de la plaza está el caño viejo, el que daba el agua más fresca, la que llevábamos para casa en la barrila. Al lado hay árboles y un poste altísimo que nos sabemos lo que es. El aspecto general habla solo.
Foto de la misma época que la anterior, la plaza está sin asfaltar, hay una acera que une la del Ayuntamiento con la de la iglesia y en la esquina de ésta se ve una puerta con un poyo delante. En este poyo nos sentábamos a charlar y por entre las rajas de la puerta se veían vigas de madera y alguna imágenes viejas que decía la gente que procedían de la iglesia de S. Andrés.

Fotografía de los años cincuenta, facilitada por Marisol García Cancelo, en la que aparece su padre Indalecio subido al caño nuevo, el que siempre estaba rodeado de charcos de agua y avispas. Detás se puede ver el viejo.





Fotografía de la plaza, años sesenta. Ya está asfaltada y en la esquina inferior izquierda podemos ver parte del pilón construido por el señor Nazario Reinoso y que sustituyó a los dos anteriores, aunque conservando los caños: el del agua caliente y el de la fria en posición original.

Tambien podemos ver la furgoneta de Andés aparcada delante del teleclub. Donde estaba el teleclub, ahora hay una capilla.

Esta fotografía fué tomada por Amalia Marcos.






Así era antes el Ayuntamiento. Esta es la fachada original.








Vista actual del Ayuntamiento con el hortelano en primer plano.










Hasta hace unos meses era así, con el campesino en el centro de una plataforma cuadrada.


















En esta fotografía, tomada antes de que terminaran las obras del Plan Estatal, se aprecia el aspecto actual de la plaza con la isleta peatonal del centro al rededor del monumento al campesino y al fondo el ayuntamiento y la iglesia.